Desprenderme del alma,
aligerar la carga que me pesa.
Dejar de sentir
presión…
ser una nube en el cielo,
la parte más etérea del firmamento.
Sin alma, quizá no duela…
no sienta, ni piense.
Quizás desde la locura…
tal vez allí encuentre calma,
sin porque, ni dudas.
Tan solo levitar en las alturas,
sin bajar al infierno de las preguntas,
de todo lo que no comprendo.
Quizá sea solo que no aprendí…
que de la vida que he vivido,
nada he comprendido.
Perpetúa tu condena,
alma en pena…
Reme Gras.
Derechos reservados.
Poema de buen gusto, amiga. Es un placer leerte.
ResponderEliminarAbrazos
Original poema.
ResponderEliminarNo te preocupes por el alma. Hay muchos que andan sin alma en este mundo según se nota en sus comportamientos.
Un placer leerte.
Con afecto:
J.Teodoro