Sobrevivo a duras penas…
me aferro al yo de mi interior.
El exterior daña… erosiona, mata,
vuelve del revés las entrañas.
No miro atrás…
pero el pasado vuelve machacón,
insistente en zaherir,
en cuestionar mi vida,
despreciativo é hiriente.
No basta mi propósito de ignorar,
mi paso firme en mis principios,
la marea de emociones arrastra,
hiriendo gratuitamente.
Y sigo caminando hacía mi futuro…
intentando sobrevivir.
Reme Gras.
Derechos reservados.
Difícil el camino, cargados vamos con nuestros pasados, y sobrevivimos, más fuertes y a veces más debilitados, pero más humanos si cabe. preciso poema. Muchas gracias por compartirlo. Un abrazo
ResponderEliminarGracias por tu visita Amparo...
ResponderEliminarUn beso.
Reme.
Un poema profundo y desgarrador, querida Reme, pero con ese punto de esperanza que caracteriza tu poesía sensible e intimista. Precioso. Comparto muy gustosa. Besos y feliz semanita.
ResponderEliminarMuchas gracias Mayte... me honras con tu visita.
ResponderEliminarUn beso.
Reme.
Un poema Hondo,y con una guinda de color verde...precioso Siloe.
ResponderEliminarBesos
Efectivamente el pasado es machacón, muy bien definido,y el poema, es hondo y penoso, muy bien bordado que al fin y al cabo es de lo que se trata, que hasta lo lastimoso lo hagamos bello, y nadie mejor que un poeta como tú para hilarlo.
ResponderEliminarUn besazo guapa
Muchas gracias Carmen... tu comentario es gratamente recibido siempre...
ResponderEliminarUn beso.
Reme.