Agua helada
empapa mi piel y cala,
profundiza, alcanzando el hueso,
congelando el corazón.
Liquido que me envuelve,
y me devuelve a la realidad,
a la rotura de un sueño
quebrando mi frágil equilibrio.
Tal vez la vida deba ser eso,
soledad, silencio, mentira...
y mi mente escape
huyendo de aquello que congela el alma.
Tirito y despierto,
me hielo y me entrego...
al desveló que siempre me acompaña.
Porque al fin y al cabo soy...
carne y alma.
Reme Gras.
Derechos reservados.
Muy cierto, Reme, nos encontramos en la vida con cosas de las que queremos huir para que el alma no se hiele.
ResponderEliminarComo siempre, todo un placer leerte querida amiga.
Besos y abrazos infinitos, querida amiga.
Gracias por tú fiel visita Marina...
ResponderEliminarUn abrazo.
Reme.
ResponderEliminar"y mi mente escape
huyendo de aquello que congela el alma.."
Yo aveces pienso, que al huir no escapo, y eso me mantiene en la eterna búsqueda de la libertad.
Bonitos versos, felicitaciones.
Ham Bashur.
Ham Bashur, muy amable por dejar huella de su paso por mi trabajo.
ResponderEliminarQuedo reconocida.
Reme Gras.