lunes, junio 24, 2013

Baile de letras


 Baile de letras.

Un tropel de letras anda bailando en mi mente; ideas sueltas que saltan por salir de mis dedos y plasmarse en palabras ordenadas, en frases coherentes; es como si nunca hubieras escrito nada, o si lo ya dicho perdiera sentido a cada minuto que va trascurriendo de lo narrado.
 Hay miles de ideas que pugnan por salir de la vida y suerte del mundo, de cómo día tras día van aclarándose ideas en mi cabeza —o quizá no se aclaran— tan solo son interrogantes que obtienen respuesta y que abren el paso a preguntas mayores.
 Todo un mundo de ideas que se enredan en las pautas de educación recibida y que siempre están en contradicción con lo que el corazón y los sentidos intentan decirme a cada paso que camino.
Lo cierto es que no comprendo que mueve el mundo. Cuando pienso que lo mueve el amor —que solo desde  el amor se comprenden comportamientos e ideas—, estallan los sentidos en derredor y entiendo que quizá sea el egoísmo  lo que nos mueve a caminar. El egoísmo por tener, por destacar, por conseguir aquélla meta o por recibir aquel halago; no sé, no término de tenerlo claro.
 Y vuelvo al ayer, a rebuscar en los cimientos de mi niñez queriendo encontrar él por qué de este resultado de hoy que me hace tan vulnerable ante cosas tan nimias, tan  tontas: el hecho de que cualquier variable desequilibre mi estabilidad emocional. Seria tan deseable el poder controlar mi estado anímico, saber que hacer cuando algo me afecta hasta el punto de hacerme perder el norte.
La única certeza que obtengo es la de saberme vulnerable ante la caricia, ante cualquier tipo de mimo o atención, y por el contrario que cualquier desaire o indiferencia me duela como herida en carne.
 Ya tengo una base de partida... ahora seguiré explorando para encontrar como parapetarme ante estas situaciones, quizá sea algo artificial, pero seria tan deseable no tener que sentir dolor —a veces ni tan siquiera deseo sentir placer— es tanto el temor, que por momentos no desearía sentir nada…

 Reme Gras.




sábado, junio 15, 2013

No voy a llorar

No voy a llorar
creí en el unicornio azul,
soñé con hadas y príncipes,
pero desperté.

Crecí creyendo en las promesas,
pero solo eran palabras,
embaucadoras y atractivas
artificios en manos de mago.

Navegue en un mar de lágrimas,
escale muros de incomprensión,
esfuerzo heroico…
hasta la extenuación.

Hoy respiro fuerte,
ensanchando pulmones,
ampliando horizontes,
olvidando ruindades, engaños.

No diré que no dolió,
pero duele más la miseria,
que la conciencia de la pobreza
he subido un escalón…

Y mí mirada esta puesta en el sol,
Ninguna sombra lo ocultara.

Porque ya…
No voy a llorar.


Reme Gras.
Derechos reservados.

lunes, junio 03, 2013

Equilibrio

Equilibrio

Desde el oculto rincón,
donde duermen los recuerdos,
se esconde el delirio.

Ese que desestabiliza la razón,
que te devuelve la angustia,
que rompe el equilibrio.

Son pequeños matices…
extrañas y delicadas partículas de nadas.

Es un rumor del viento,
una nube extraviada,
una  pequeña sombra.

Y de nuevo ese frágil equilibrio,
esa quietud, esa serena paz,
estalla en miles de miedos.

Te aferras al suelo, inestable,
y rezas al cielo.

Todo es susceptible de cambio,
hasta que de nuevo reaparece tu sonrisa,
y el equilibrio resplandece acogedor.


Reme Gras.

Derechos reservados.